El territorio de Palmira, enclavado en la hermosa geografía ecuatoriana, ubicado en la provincia de Chimborazo, cantón Guamote, celebra con orgullo sus 187 años como parroquia. A lo largo de su historia, ha experimentado cambios políticos, perteneciendo a diversos cantones como Riobamba y Colta antes de encontrar su lugar en Guamote, que fue desde el 17 de agosto de 1946.
Palmira, un nombre que resuena con historia y resistencia. Según Janeth Paca, vicepresidenta del Gad Parroquial, la historia de Palmira se remonta a 1836, cuando un coro llegado de Colombia le otorgó este nombre. Este territorio fue habitado por Cacicazgos como los Guamutis, Tipines, Atapos y Bishudes. En la actualidad comprende 38 comunidades del cantón Guamote. Mientras que la identidad de Palmira se forja en la rebeldía, desde la resistencia al imperio incaico hasta la lucha constante contra colonizadores españoles y terratenientes durante la colonia y la república.
Las organizaciones de rebeldía han sido un pilar fundamental en la historia de Palmira, marcando su carácter único y su capacidad para enfrentar desafíos. Es por eso que al conmemorar sus 187 años de parroquialización, Palmira se viste de color con atractivos banderines colocados por todas las calles de la parroquia en forma de celebrar esta fecha tan alusiva.
Habitantes de diferentes lugares visitan Palmira, porque a demás del Gad Parroquial siempre existen priostes que arman una agenda de actividades en Honor al Patrono San Juan Evangelista, en esta ocasión los priostes 2023 fueron “La Pre Asociación de Zurdo Tello” quienes realizaron festivales musicales, desfile de la alegría y tres tardes taurinas antes de concluir el año.
El presidente de la Junta Parroquial del Gobierno Autónomo Descentralizado Parroquial Rural Palmira, Francisco Chimbolema en medio del discurso en la sesión solemne en conmemoración a los 187 años de parroquilización agradeció a aquellos que contribuyen al desarrollo de la parroquia, destaca los esfuerzos continuos en diversas comunidades, además detallo que ya están ejecutando varias actividades para mitigar la desnutrición crónica infantil, “muchas gracias le agradezco de todo corazón” puntualizó.
Los 187 años de parroquialización de Palmira no solo representan un hito temporal, sino un testimonio de resiliencia, identidad y la constante búsqueda de progreso. Desde sus raíces rebeldes hasta los desafíos contemporáneos, Palmira sigue siendo un ejemplo de comunidad unida que mira hacia el futuro. En sus propias palabras, expresadas por líderes comprometidos, queda claro que Palmira no solo conmemora su historia, sino que también se prepara para un futuro lleno de logros y prosperidad.